La ministra de Salud, Zulema Tomás, informó que se ha declarado en alerta sanitaria la zona afectada por la inundación ocurrida la madrugada del domingo en San Juan de Lurigancho, debido a que representa un riesgo para la salud.
Asimismo, advirtió que las familias del distrito que se resisten a salir de sus viviendas corren el riesgo de sufrir diversas infecciones, digestivas y respiratorias. Por ello, reiteró su pedido para que abandonen sus hogares y pasen por una revisión del personal de salud.
Tomás recordó que se trata de aguas residuales contaminantes y que por eso las personas no pueden caminar en medio del agua empozada, porque, de lo contrario, presentarán náuseas, vómitos, diarreas, conjuntivitis, entre otras enfermedades.
Comentó también que, entre ayer y la madrugada de hoy, se atendieron alrededor de 165 personas en los tres puestos médicos de avanzada instalados en los parques "Los Jardines", "Medalla Milagrosa" e "Innova".
"La población camina fácilmente por estas aguas, eso no puede pasar, tienen que salir y darse un baño completo, no puede quedarse con esa agua en el cuerpo", refirió al indicar que la Policía Nacional cuidará sus viviendas mientras ellos estén ausentes.
Finalmente indicó que cuando se termine de retirar toda el agua inundada se hará una remoción del barro y posteriormente se fumigará casa por casa, para evitar posibles infecciones. "Todo lo que está contaminado tendrá que ser desechado", agregó.