La capital de la región Pasco se ubica a casi 4400 metros sobre el nivel del mar y desde sus orígenes ha estado ligada al trabajo minero que se mantiene hasta la actualidad.
Sin embargo, el mismo ha ido modificando el panorama de la ciudad y el medio ambiente que se ha visto contaminado por residuos provenientes de la actividad minera.
Hoy en día, los efectos de ese daño también afectan a la población. Un claro ejemplo de ello son los niños de Cerro de Pasco, quienes presentan metales como plomo y arsénico en la sangre por encima de los límites admisibles, según diversos estudios realizados en la última década.
Ese es el caso de Josué de 14 años de edad, un menor al que le diagnosticaron retardo mental debido a los niveles de plomo que presenta su cuerpo y debido a esa afectación tuvo que abandonar la escuela.
Asimismo, un equipo de Panamericana Televisión pudo conversar con Erminia Villanueva, una maestra de educación primaria de un colegio, ubicado en Champamarca, la zona más afectada por la contaminación minera en Cerro de Pasco.
“Tenemos niños que sí aprenden, pero aprenden en el momento. Si mañana repetimos el tema, el niño no se acuerda”, señala.
A estos problemas también se hace presente el cáncer que es generado por la presencia de estos metales en el cuerpo.
Para el 2015 un grupo de residentes marchó a Lima y se encadenaron en la sede del Ministerio de Salud con la finalidad de exigir una atención urgente de parte del Estado. Pero a raíz de ello ¿qué propuestas brindaron las autoridades para reducir la contaminación ambiental? No se pierda la respuesta a esta interrogante en la segunda parte de este informe que será emitida este viernes en ‘24 Horas Edición Central’.
