Tras conocerse que la Procuraduría Ad Hoc fijó en 3 mil 468 millones de soles la reparación civil que pedirá el Estado peruano a la empresa Odebrecht, las críticas no tardaron en llegar.
Y es que hay quienes consideran que de esta manera se están poniendo en riesgo la colaboración eficaz del exrepresentante de Odebrecht en Perú, Jorge Barata. Algo que el procurador Jorge Ramírez negó tajantemente, indicando que son dos cosas totalmente diferentes.
"Van por cuerdas separadas. Si el autor del delito no llega a un acuerdo con el agraviado, respecto a la reparación civil, el fiscal estima un monto y cierra su acuerdo de colaboración eficaz”, expresó.
Cabe señalar que el monto que solicitará la Procuraduría corresponde a tres proyectos en lo que Odebrecht reconoció haber entregado sobornos para conseguir las concesiones. Estos son: Gasoducto Sur Peruano, la Interoceánica Sur tramos 2 y 3 y la carretera Chacas (Áncash).
En tanto, la constructora brasileña ha señalado que el monto de la reparación civil es elevado a comparación de las sumas establecidas en otros países. Según Ramírez, la empresa buscará victimizarse con la finalidad de usar todos los elementos y mecanismos a su favor.
Por otro lado, el procurador negó que exista un enfrentamiento con la Fiscalía, indicando que su trabajo no tiene por qué afectar las labores del Ministerio Público, pues el Poder Judicial tendrá la decisión final.
Finalmente, se pudo conocer la constructora brasileña plantea pagar una reparación civil de 66 millones de dólares, lo que ha sido considerado por la Procuraduría como una ofensa para el país.
