Un puente próximo a construirse en la quebrada de Armendáriz, entre Barranco y Miraflores, unirá los malecones de ambos distritos y promete dar transitabilidad y seguridad tanto a peatones como a ciclistas, además de implementar un jardín botánico.
Carlos Ramírez, gerente de Desarrollo Urbano de la Municipalidad de Miraflores, indicó que con esta obra se recupera 35 mil metros cuadrados para los vecinos, además con tratamiento paisajístico y ambiental e incluso con medidas en caso de emergencias y sismos.
“Es un proyecto integral, que además de poner en valor el espacio público para los vecinos, permite facilidades de conectividad, porque permite articular el malecón de Miraflores con el de Barranco”, aseguró. El puente irá desde la esquina donde se conectarían los malecones.
Las estructura, de 152 metros de largo y 6 metros ancho, brinda condiciones excepcionales para peatones, ciclistas y vehículos de micromovilidad, “no para autos”, aclaró.
