El fuego se desató durante la madrugada, los pobladores nada pudieron hacer para tratar de sofocar el incendio que en solo minutos terminó por consumir diez viviendas en Talara.
Los bomberos se hicieron presentes en el lugar del siniestro pero la poca presión de agua complicaba las labores de los hombres de rojo que se vieron obligados a apagar las llamas con baldes de agua y arena.
Los pobladores en todo momentos apoyaron el trabajo de los bomberos para controlar el fuego que se habría iniciado aparentemente por un cortocircuito y que se expandió rápidamente debido a que el material de las viviendas era altamente inflamable.
Representantes de defensa civil llegaron a la zona para evaluar el nivel de los daños y llevar ayuda a los damnificados que lo han perdido todo. A pesar de la magnitud del incendio, afortunadamente no se registraron heridos.