A la llegada del magnate Donald Trump a la ciudad de Phoenix, Arizona, miles de personas salieron a las calles a mostrar su inconformidad con el presidente por las recientes declaraciones sobre el atentado en Charlotville.
El propio alcalde, Greg Stanton, pidió al presidente que no realizara el evento cuando aún estaba en boga la polémica en torno a los coflictos en Charlottsville. Sin embargo, el presidente acudió. La visita es el primer evento político del maganate desde los hechos violentos en Virginia.
Durante el mitin político aprovechó para atacar a la prensa y llamó “gente enferma” a las personas que trabajan en los medios de comunicación. También, el presidente se defendió sobre las acusaciones de la poca energía con que condenó el atentado “ Yo hablé en contra del odio, la intolerancia y la violencia. Condené a los supremacistas blancos y al Ku Klux Klan”
Pese al discurso de Trump, se desataron los hechos de violencia en la calle que forzaron a los policías a utiliar bombas de humo para dispersar las protestas. Los manifestantes arrojaron piedras y botellas. Se reportaron 4 detenidos.
