Hoy, Estados Unidos y Rusia pusieron fin al tratado de desarme nuclear, firmado al final de la Guerra Fría, en una decisión que reaviva el temor a una carrera armamentista entre las potencias mundiales.
El acuerdo, firmado en 1987, limitó el uso de misiles de alcance intermedio (de 500 a 5.500 km), tanto convencionales como nucleares.
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, anunció la retirada formal de Washington, minutos después de que Rusia declarara el fin del tratado.
EEUU acusó a Rusia durante años de desarrollar un nuevo tipo de misil, el 9M729, alegando que violaba el tratado. El misil tiene un alcance de unos 1.500 km, de acuerdo con la OTAN. Pero Moscú afirma que solo puede recorrer 480 km.
La Casa Blanca lanzó a principios de este año un periodo de transición de seis meses en la suspensión de su participación en el acuerdo, que terminaba hoy.
Poco después Moscú inició su proceso de retirada, y el mes pasado el presidente ruso, Vladimir Putin, suspendió formalmente su participación.
