En medio de arengas y rodeado de policías antimotines, el presidente Alan García acudió al colegio Carmelitas ubicado en Miraflores para emitir su voto. El cordón policial impidió que los periodistas se acercaran a formularle preguntas. El ex mandatario terminó de votar y se dirigió a la salida donde lo esperaba un vehículo. Antes de ingresar a la camioneta indicó que iba a permanecer en su vivienda y, desde ahí, iba a declarar.
Efectivamente, al llegar a su inmueble el examandatario respondió algunas preguntas. García indicó que el referéndum tiene aspectos positivos; sin embargo, detalló que este no solucionaba problemas urgentes del país como la inseguridad ciudadana , el desempleo o las medicinas caras. “¿Después del referéndum qué hay?”. Además, García Pérez sostuvo que el referéndum tiene un aspecto positivo, aunque también puntualizó de que este puede ayudar a consolidar aspiraciones de poder. “Las autocracias han tenido referéndum. Esperemos que esto no sea el caso”, advirtió.
El ex jefe de Estado expresó su crítica sobre algunas propuestas en esta jornada electoral. La primera de ellas, manifestó su disconformidad con la posibilidad de impedir la reelección de congresistas. “Prohibir la reelección de los congresistas no garantiza que el próximo congreso sea cualitativamente mejor o muy inteligente”. En ese sentido también expresó su opinión sobre la conformación de la Junta Nacional de Justicia (antes CNM): “Entregar a siete personas diferentes la selección y el examen de 5 mil o 6 mil jueces y fiscales no garantiza tampoco que vaya a cambiar el aparato estatal y su forma de tratar a los ciudadanos”.
El exmandatario García llamó al diálogo y a la concertación a favor de la seguridad y el empleo. “Me preocupa que se esté hablando de una nueva reforma laboral para recortar los derechos”, indicó.
